Lo de la SGAE no es nada del otro mundo
A ver, que una persona utilice su poder dentro de una empresa para derivar contratos a empresas amigas es el ABC de la empresa española. A nadie le debería extrañar comportamientos de este tipo. No os podéis ni imaginar lo complicado que puede llegar a ser en España contactar con la persona responsable de contratación de cualquier empresa. Da igual lo que vendas, da igual que sea mejor, más bonito o más barato, no tienen nunca intención ni siquiera de escucharte. La tónica es siempre la misma: me nombran director general, tengo presupuesto para contratar empresas del tipo A y del Tipo B, si merece la pena le digo a Paco y a Pepe que se monten una empresa de estas y me nombren socio capitalista y a veces ni eso. De esta manera derivo dinero de la empresa que dirijo a mi cuenta personal. ¿Significa eso que no necesite contratar empresas del Tipo A y del Tipo B? Probablemente no, pero seguro que encargaré más de lo que necesite y no me dolerá la mano al aceptar tal o cual presupuesto. Lo único malo de la SGAE es que no se hace con capital privado y que no es una empresa la que lo hace, sino una sociedad supuestamente sin ánimo de lucro y que lo que debe velar es por el interés de los autores y no de cuatro enchufados. Pasa lo mismo con la política, ¿Cuantos políticos creeis que hay de vocación?¿ y cuantos de esos creeis que alcanzan cuotas de poder?. No se trata de montar un circuito de F1 para los ciudadanos por poner un ejemplo, ni para atraer público a la ciudad, se trata de que así puedo gastarme millones de Euros en muy corto espacio de tiempo y nadie me va a criticar por hacerlo, bueno si, los cuatro tontos de izquierdas de siempre, pero donde esté Fernando Alonso y las empresas que me montan la publicidad, las gradas, las que se encargan de la seguridad, etc… que se quiten las guarderías públicas.
La SGCE está desolada
La Sociedad General de Carteros Españoles está desamparada. Desde que existe el email en este país y la gente puede enviar sus cartas de manera gratuita el sector está de capa caída. Salieron el sábado en manifestación en defensa de sus puestos de trabajo y de lo que consideran un derecho adquirido con los años, por lo que van a solicitar al Gobierno el pago por parte de la sociedad de un canon de compensación por cada email enviado y otro a las teleoperadoras por los SMS que les están quitando la vida. Su portavoz, Josema Tasello, en una entrevista a la Vanguardia ha dicho que la gente que envia emials de forma discriminada no se da cuenta de la cantidad de gente que depende del envío de cartas: los fabricantes de sobres y sellos, los de pegamento, los de alfombrillas para mojar el sello, los de bolígrafos BIC, los fabricantes de carritos amarillos y por supuesto los carteros, y ha pedido que la menestra de cultura promulgue una ley para cerrar las cuentas de correo a todos aquellos que manden power points basura de forma indiscriminada a todos sus contactos y por supuesto que embarguen las cuentas del banco a sus creadores, «Los carteros y sus hijos tienen derecho a seguir viviendo de las cartas que enviaron nuestros padres otros cincuenta años por lo menos», ha declarado y el que no lo comprenda ya me está robando.
El canon es el canon

Viñeta del Faro de Vigo vía menéame
La SGAE contrataca
No han tardado ni un día. Se sienten heridos, dolidos, perseguidos, son buenos, lloran, son humanos, sienten, snif. Quieren demandar a las cuatro asociaciones que les acusan de estafa, apropiación indebida y fraude por denuncia falsa y difamación. Lo que no se entiende es por que demandan a estas asociaciones y no a los medios de comunicación orígen de los datos aportados en la denuncia de las asociaciones. Bien, perfecto, ya estamos todos, a jugar.
El cazador cazado
Se veía venir. Tantas voces en contra de una sociedad ‘supuestamente’ sin ánimo de lucro, que al final la SGAE ha sido denunciada por la Asociación de Internautas (AI), la Asociación de Usuarios de Internet (AUI), la Asociación Española de Pequeñas y Medianas Empresas de Informática y Nuevas Tecnologías (APEMIT) la Asociación Española de Hosteleros Víctimas del Canon (VACHE) por ‘supuestamente’ lucrarse a través de una maraña de empresas afines a los propios directivos de la SGAE, maraña que ya fue desentrañada por público. Abogados no les van a faltar, ya están acostumbrados a ir al juzgado, pero está por ver todavía que se sienten en el banquillo. Ojalá al final de todo esto surga una nueva Sociedad que defienda de verdad los derechos de ‘todos’ sus asociados por igual y se preocupe menos de la recaudación en bodas, banquetes y comuniones.
Puedes leer aquí el texto de la denuncia.
Respiro procesal
Revés de derechas para las entidades de gestión de derechos de autor y sus maquinarias de denuncia y todo gracias a D. Eduardo de Porres, titular del Juzgado de Instrucción 4 de Madrid, que ha entendido a la perfección de que va todo esto. A partir de ahora colgar enlaces de descarga, e incluso ganar publicidad en este tipo de páginas no es delito. ¿Por que?. Porque la web denunciada, en este caso, sahremula, no alojaba archivos protegidos por la Ley de Propiedad Intelectual ni desde ella se realiza directamente la descarga. Vamos, que el delito está en otro sitio. Blanco y en botella.