La carta de la Guerra
Lo peor de todo es que Sarah Palin tiene mucha razón. El entrevistador la pregunta, atónito, si realmente cree que la reelección de Obama pasa por declarar la guerra a Irán después de que ésta le haya dicho que jugando su carta de la Guerra lo tendría asegurado. Palin se da cuenta y gira su discurso a la excusa de siempre, se trataría de asegurar nuestra seguridad y la de nuestros aliados. Lamentablemente solo los borrachos, los niños y la Palin dicen la verdad. Esta última sin querer. Que malo es querer jugar a ser Dioses con las vidas de los demás: